El juez procesa a los militares señalados de la masacre de Nuevo Laredo

Cuatro cabos de caballería dispararon supuestamente 117 veces contra un grupo de jóvenes desarmados en Tamaulipas en febrero. La Fiscalía les acusa de asesinato e intento de asesinato

Un juez ha procesado a cuatro militares por la matanza de Nuevo Laredo. Los militares, cuatro cabos de caballería, dispararon supuestamente en 117 ocasiones contra un grupo de muchachos desarmados, en febrero, en la ciudad fronteriza. Cinco murieron, otro resultó gravemente herido y un séptimo salió ileso. Las partes cuentan ahora con dos meses para acumular pruebas antes de presentárselas al juez. La Fiscalía General de la República (FGR), parte acusadora, no ha informado de si investigará la cadena de mando o se quedará en las acusaciones contra la tropa.

La masacre de Nuevo Laredo supone una de las grandes manchas en el actuar policial de las Fuerzas Armadas en México en los últimos años. Los militares atacaron sin que mediase una agresión en su contra. En sus dichos, señalan que escucharon detonaciones de arma de fuego, pero aclaran que los disparos nunca salieron de la camioneta en la que viajaban los muchachos. De hecho, ninguno de los cuatro vehículos militares que participaron en total en el operativo presentaba agujeros de bala. Durante la madrugada, los militares siguieron una camioneta que les resultó sospechosa. La camioneta chocó -no se sabe si porque una castrense les golpeó por detrás o no- y acto seguido, los soldados dispararon.