El mercado de Wuham vendía animales salvajes, los cuales eran sacrificados sin controles sanitarios, indicaron medios internacionales.
CHINA.- Rodeado de cintas de advertencia y policías en la zona, el mercado de mariscos y animales salvajes e Wuham se convirtió en el epicentro de una enfermedad que mantiene en vilo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a los aeropuertos internacionales por un nuevo virus que lleva al menos 17 muertos en China.
El mercado de Wuham, también conocido como la zona cero por el brote del nuevo coronavirus, era un lugar exótico donde los espectadores podrían observar ratas y crías de lobos “recién sacrificados”. Además, se vendían peces vivos, animales y aves.
Los primeros casos fueron vinculados a empleados del mercado, sin embargo, el lugar fue cerrado y desinfectado el 1 de enero.
Dicho mercado se encuentra en la provincia de Hubei, y es un sitio donde se vendía todo tipo de animales, desde ratas, puercoespines, venados, hasta serpientes a granel.
La cadena CNN obtuvo imágenes exclusivas de los sacrificios de animales en el mercado, las cuales el gobierno chino censuró. El medio detalló que en el mercado se vendían productos del mar y animales salvajes sin ningún tipo de control sanitario.